Roberto de las Carreras: Reto a Venus Cavalieri
Púgil del sensualismo, te desafío a la lid amorosa!
¡El genio griego ha inflamado mi alma por la gloria de los lechos!
¡Anhelo más que el triunfo en los juegos olímpicos del Arte, más que el oro y los trofeos y las ganas de Bizapur, contemplar, después de la lucha
hirviente, los ojos de una amante, llorosos y agradecidos!...
¡La moribunda lasitud de un cuerpo ablandado por el placer, me sonríe mejor que la ambrosía; me embriaga más dulcemente que el Falerno apurado en ánforas etruscas!
¡En la noche de Venus yo canto a los deleites soberanos un himno de fatigas!
¡Yo vivo en las súplicas de la agonía de los besos la eternidad de la tumba!
¡Yo recojo en el seno batiente de las locas derrotadas el laurel de los triunfos venusinos!
Yo seguiré la ruta de tus convexidades, ¡Intrincaré tu cuello, tus brazos, tus senos, tu cintura, tus muslos, tus pies de lotus, con hilos de perlas de besos!
¡Yo tachonaré tu cutis de nácar con las manchas moradas que enseña el libro del amor indostánico!
¡Serán tus incensarios las alcobas hervorosas de sándalo consagradas al arrobamiento de Kama!
¡Se desvanecerán sobre tu ara la mirra y el incienso, el sándalo y el almizcle, el cinamono y el ámbar, todas las notas de la música del Perfume!
¡Yo haré fulgurar bajo tus párpados volteados al centelleo de los goces trémulos que entonan sus cánticos de gloria en los Paraísos del Profeta!
¡Yo ceñiré a tu cuello la sierpe del placer afanoso! ¡Yo abismaré tu razón con filtros salomónicos!
¡Yo poseo el Ovidio y de Propercio el secreto de rendirte!
de Psalmo a Venus Cavalieri, de Roberto de las Carreras, publicado en Montevideo en 1905
¡El genio griego ha inflamado mi alma por la gloria de los lechos!
¡Anhelo más que el triunfo en los juegos olímpicos del Arte, más que el oro y los trofeos y las ganas de Bizapur, contemplar, después de la lucha
hirviente, los ojos de una amante, llorosos y agradecidos!...
¡La moribunda lasitud de un cuerpo ablandado por el placer, me sonríe mejor que la ambrosía; me embriaga más dulcemente que el Falerno apurado en ánforas etruscas!
¡En la noche de Venus yo canto a los deleites soberanos un himno de fatigas!
¡Yo vivo en las súplicas de la agonía de los besos la eternidad de la tumba!
¡Yo recojo en el seno batiente de las locas derrotadas el laurel de los triunfos venusinos!
Yo seguiré la ruta de tus convexidades, ¡Intrincaré tu cuello, tus brazos, tus senos, tu cintura, tus muslos, tus pies de lotus, con hilos de perlas de besos!
¡Yo tachonaré tu cutis de nácar con las manchas moradas que enseña el libro del amor indostánico!
¡Serán tus incensarios las alcobas hervorosas de sándalo consagradas al arrobamiento de Kama!
¡Se desvanecerán sobre tu ara la mirra y el incienso, el sándalo y el almizcle, el cinamono y el ámbar, todas las notas de la música del Perfume!
¡Yo haré fulgurar bajo tus párpados volteados al centelleo de los goces trémulos que entonan sus cánticos de gloria en los Paraísos del Profeta!
¡Yo ceñiré a tu cuello la sierpe del placer afanoso! ¡Yo abismaré tu razón con filtros salomónicos!
¡Yo poseo el Ovidio y de Propercio el secreto de rendirte!
de Psalmo a Venus Cavalieri, de Roberto de las Carreras, publicado en Montevideo en 1905
comentarios:
14:56
que bonito!! me pierdo un rato y encuentro mil post nuevos
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