augusto roa bastos

augusto roa bastos



e me pide un esbozo autobiográfico. Qué podría agregar a estas máscaras fotográficas, insobornables aunque corteses reveladoras de las desdichas de un rostro, de sus estigmas más visibles, reveladoras tal vez, en algún parpadeo inmovilizado, de lo que ellas encubren. Quién soy? Un desconocido que se ignora: el "doble" de un extraño, la mitad de sí mismo. De dónde vengo, a dónde voy? De la vida a la muerte, como todo el mundo. Y lo demás es cuento.

Por eso, narrador de historias más o menos apócrifas, siento particular desconfianza, entre los géneros de de ficción, por la autobiografía, los diarios íntimos o los autorretratos verbales, en una palabra, por la palabra; sobre todo, en función de agente confidencial, o de relaciones públicas. Por la palabra en acto también, desdichadamente.
Sobre todo hoy, cuando la escritura ha regresado a su condición de iconografía rupestre en relación a un mundo cada vez más tecnificado, más ajeno al hombre; cuando en la literatura, en los escritores más educados, vuelve a mugir melancólicamente el bisonte de Altamira. Los miedos ancestrales de antropofagia ritual sólo han cambiado de signo y de forma: en lugar del hacha de sílex, la bomba; en lugar del arco y la flecha, el napalm.

Entre el monólogo de Hamlet y los graffiti de Mayo; entre los prudentes consejos de Don Quijote a Sancho para el gobierno de la Insula y el presente del mundo (de nuestras ínsulas baratarias latinoamericanas, para no ir más lejos); entre los excesos de la "sociedad de la abundancia" y los éxodos de miseria y de hambre; entre las pisadas del hombre en la luna y el futuro del desierto volcánico que sentimos latir bajo nuestras pedestres pisadas; entre todo esto y lo que no sabemos todavía o ya hemos olvidado, que se fixo la palabra? Qué puede hacer todavía?

Autor de ficciones o hechura de estas ficciones, yo también he cedido a la manía de buscar el semejante en mí mismo, de probar con los dientes, avaramente, la moneda falsa de la identidad. Pero sólo he coleccionado o creo haber coleccionado fantasmas al precio de escupir casi todos mis dientes, convirtiéndome en el más afantasmado de todos. Que ellos hablen, pues, por mí; de mi vida, que es el cuento más intrascendente que he hecho.

5 comentarios:

Anónimo dijo...
16:40
 

estimado hugo: recuerdo con melancolia semejante a la del bisonte, guardando las distancias, el dia que luis godoy me recomendo "yo el supremo" (inencontrable en esa epoca diluviana) pluma de cisne!

acepta este abrazo,



PS:

muerte por agua

En el pueblo hay una casa desierta y en la casa desierta un pozo y en el pozo un agua que refleja el reflejo del espíritu del mal. Quien llega al pueblo va irremediablemente a la casa desierta, quien llega a la casa desierta se conduce al pozo, quien llega al pozo mira el agua y en su reflejo muere presa de la mirada del espíritu maligno


(aprovechando los ceros y bits y demases, no hace mal leerlo de nuevo)

Anónimo dijo...
04:29
 

Hugo,

gracias por resucitar a don Augusto, en los mismos días estaba en lo mismo que vos, fijate en mi nuevo blog:
http://spaces.msn.com/members/ROABASTOS/

La vida es cuento, y la ficción es "hacer que la palabra sea real", de estas inversiones sacamos los fantasmas de Roa nuestra ambigua realidad de Hijos de Hombres...

Eric Courthès, un Roamaniático francés....

Casi no existe homenaje que no llegue tarde. Al parecer menos el suyo, Eric Courthès. Verlo a Ud. junto al maestro, en su blog; produce alegría del corazón.

Poeta ene. Seguramente, es posible, que usted se refiera al maestro que vive o vivía en la calle Manuel Rodríguez de la ciudad de Punta Arenas. Una vez lo escuché hablar a Luis Godoy sobre algo que bien podría ser una olla. Recuerdo que fue una clase magistral.
Un abrazo

Anónimo dijo...
15:53
 

estimado hugo: me refiero al venerable maestro godoy, como certeramente apuntas. a proposito de eric courthes, lei "lo transtextual en roa bastos", denso, emotivo articulo.
aprovecho para hacer, respetuosamente, un micro-homenaje a tu trilogia picaresca: "pasion gitana-la sorbona-mercedes o bien podria ser tu abuelo" (de reciente aparicion en estos vastos dominios virtuales) la cual me provoco un descontrol catatonico de carcajadas que ni flaubert ni anais nin en una borrachera con bukowski, henry miller, jack kerouak, jack daniels y johny walker podrian haber producido, de haberselo propuesto. por favor acepta este abrazo



n.