leonora vicuña

leonora vicuña



EBRIAS AGUAS

Hacia las ebrias aguas de la noche
me lleva mi velero empecinado
por el barrial de un mundo desolado,
de esta ciudad que hierve como un broche.

Dan vuelta las ruletas del derroche
de este país que yace aniquilado
que olvida su presente y su pasado,
y donde sólo gana el vil Fantoche...

Vieja ciudad, navego en tus orillas
tus aguas de tugurios y de bares
sumidos en la luz de las polillas.

Mi barca se detiene en esos mares
donde naufragan las almas sencillas
que hacen llorar a Cristo en los altares...

Santiago de Chile, 1981

DAMAS CEBOLLAS
A Stella Díaz, poeta y amiga

Estas dulces cebollas calderanas
que hacen llorar a las damas talquinas
agonizan en sórdidas vitrinas
colgando como lánguidas campanas.

No saben que alto el sol en las ventanas
anuncia las fatales guillotinas
que suelen relucir en las cocinas
de las finas señoras casquivanas

También ellas colgadas algún día
del largo cordón de su pasado
aguardarán temblando el mediodía,

en que el diestro cuchillo de Dios Padre
desarme para siempre su tinglado:
¡Llorad entonces, solas y sin madre!

Santiago de Chile, 1983

ELVIS PRESLEY

Gardel del rock and roll y del gemido,
sudando ron en gotas escarlatas
bajo la noche plástica desatas
la sobredosis blanca del olvido.

El tango que renace en tu latido
volviendo al ring del blue y a las mulatas,
transforma sus polleras en fogatas
que giran embriagadas de sentido.

Ya no eres más el rey del firmamento
del escenario ardiente en las pantallas
donde viene a vivir por un momento

la dulce melodía que ahora callas
bajo una loza fría de cemento,
¡Gardel del Rock and Roll que me desmayas !

LA HORA DEL LOBO

Es la hora del lobo.
La madre cierra suavemente las persianas.
Salen de sus oscuros escondites las polillas,
las baratas.
Puertas adentro la ciudad se recoge
en su desesperanza.
En el silencio total que nos inunda
un suspiro puede ser una amenaza.

Los lobos rondan las calles abandonadas.

De pronto: disparos y un grito a la distancia.
El corazón se agita.
Los ojos se dilatan.
Nadie se mueve.
Nadie dice nada.
Pero todos sabemos
en la tibia oscuridad de la casa
que alguien esta noche ha caído en una trampa.

Santiago de Chile, 1982

MUJERES

La Dama, la Garzona, La Cualquiera,
La de la Vida, Nadie, la Picante,
La niña del bolsón y la del guante,
La más perdida o la feliz niñera.

La Madre, la Dolores, la Sincera,
La dulce amiga o la mortal amante,
La que en sus ojos guarda algún diamante,
O la que lleva un arma en su cartera:

Todas en fin, Señor, somos decentes
Aunque jugamos con la picardía
Y nos hacemos siempre las prudentes.

¿Qué más será un pecado en esta vía
Perder el norte por un hombre ardiente?
¡Hasta una monja desfallecería!

NOCTURNO 1

La vacía luna
y el vacío mundo.
Sola la noche inmensa
desborda
de su savia profunda y olorosa
la perfecta
Rosa de la Nada
que deshoja el Tiempo.

NOCTURNO 2

Apuntas con el dedo al lucero en la ventana.
Esa estrella ha estado apuntando
toda la noche
con su ojo de diamante
tu pequeña y vacilante existencia.

NOVIAS ESPUMAS

Espumas de los mares que en las rocas
hacen anillos de sal, hacendosas,
son las sirenas que esperan ansiosas,
lucir sus blancos encajes y tocas.

¿Qué bergantín no esperan estas locas
espumas de los mares, blancas rosas,
romper en mil astillas venenosas
besándole a los náufragos las bocas?

Como novias desnudas en las aguas
a todos los viajeros enamoran
luciendo sus estelas como enaguas.

Y bajo el ruedo brillan las espadas
que clavan tan sonrientes, aunque lloran,
dueñas del tiempo, damas de la nada.
Santiago de Chile, 1980

ROSA

En una habitación abandonada
contemplas una rosa de ceniza.
¿Es una mancha de cal o de tiza
o sobre el muro tinta derramada?

Perdura un leve instante dibujada,
en tus pupilas su forma precisa.
Mas luego es una imagen que se triza,
una ilusión que yace desolada.

Tus ojos quieren ver la eterna rosa
donde tan sólo el polvo y el olvido
habitan en silencio cada cosa.

Y aunque estás sola y todo lo has perdido
hay una mancha clara y amorosa
que para tí en el muro ha florecido.

Lyon, Francia. 1983/84

SOLA

¿El espejo está vacío o está roto?
No hay nada.
Viejos sueños.
Las sombras son más vivas que lo vivo.
Lo vivido es más real que lo real.
Sola.
En una ciudad desteñida como tarjeta postal,
cruzas un puente infinito
de la mano de un poeta loco
hacia Pimlico.

Ahí van los leones rosados
en la corbata de Jorge Teillier
entrando al Italo un domingo sucio y gris
en Santiago de Chile.
¿Para qué recordar?
Estás en el mismo día y a la misma hora de siempre.
No hay nada como el tiempo para no pasar.
No hay nada.
Sólo viejos sueños.

BOITE ZEPPELIN ` 81*

Bailan las gordas estriptiseras en la boite negra
bailan las rubias pordioseras agrias marineras
bailan las estrellas de papel diamante las botellas
y las trampas bailan
al son de las putas las trompetas
lucen la carne flagelada por noches que degüellan
esperando la música acabe justo
en el momento de poner
el sexo sobre la silla y no se vea
no sea cosa que de las mesas salgan sombras que se prendan
bailando como ellas
para tocarlas, gordas estriptiseras,
no sea cosa que vengan de la calle las panteras
los gordos oficiales charreteras, metrallas y banderas...
Bailan entonces de nuevo escondiendo el sexo
las gatas ululantes las bomberas
luciendo los mordiscos moretones
los golpes
los crespones las ojeras
mientras pasa la noche borracha cantinera
y el Zeppelin se cierra como una tumba abierta.

* Referencia a la conocida boite nocturna santiaguina del barrio Mapocho.

2 comentarios:

Creía reconocer el dibujo que ilustra este blog y mi memoria sabía que lo había visto en alguna parte:
"Los rostros de la lluvia" de Marino Muñoz edición de 1971 ilustrado por Andrés Sabella.
Muy buenas entradas, la Wilms y los cuentos de Wernicke... ah y un poema potente de algún poeta del paralelo 53 que no se quizo identificar.

Leonora es una fotógrafa maravillosa también, gracias por traerla a la superficie que puedo tocar.