Amor amor amor

Amor amor amor

Ve por ahí y haces con tu vida lo que te plazca. Lo que estimes conveniente. Lo que te plazca. Un tamborcito de ternura. Una bicicleta frente al Estrecho. Un semáforo para borrachos. Lo que te plazca. Ve por ahí. Puedes bailar en una pata. Ponerte en cuatro patas. Ir por el mundo enarbolando tu bandera. Por ahí. Tu bandera de chica superada. De lectora de Amélie Nothomb. Escuchando a Bach. Comiendo lechugas. Haciendo yoga con un yogui. Ve por ahí. Procurando siempre no llamar la atención pero llamándola. Basta. Insoportable. Eres insoportable. Te odio. Te odio más que a los nazis. Más que a mi madre. Más que al Real Madrid. Puedes decir a todo el mundo que fui injusto contigo. Malo. Ruin. Una mierda de tipo. Un poeta mediocre. Que estoy acabado. Que lo tengo pequeño. Que no tengo dónde caerme muerto. Que soy un perfecto borracho. Un idiota. Me importa una mierda tu puta opinión. No me importa. Lo importante es que te tengo lejos. Cada vez más lejos. Que no te tendré que ver ni oír. En mil años. No te tendré que ver ni oír. Trajinar por casa. Dar vuelta los cajones. Fumar. Tomar café. Conectarte a Internet. Tomarte todo el licor sobrante. Escuchar todo el tiempo a Janis Joplin. Doy gracias a Dios que pude decírtelo mientras te mataba.

2 comentarios:

Este escrito me parece sensacional. Saludos

Saludos María Alexandra.