Mañana te lo prometo
Mañana te perderé. Mañana dejaré de fumar. Mañana no escucharé a Béla Bartók. Mañana dejare de beber. Mañana bajaré de peso. Mañana escribiré. Te escribiré. Mañana te amaré. Mañana no te amaré. Mañana seré bueno. Malo. Mañana aclararé todo. Ya verás. Mañana iré de compras. Al dentista. Al cine. Mañana. Mañana pasaré por idiota. Inteligente. Mañana ordenaré mi biblioteca. Mañana te espero a las tres. Mañana bailaré. Mañana no te veré. Mañana será viernes. Mañana volveré a Buenos Aires. Mañana te lo prometo. Mañana dejaré de pensar en ti. Mañana iré a Punta Arenas. A Santo Domingo. Mañana estaré alegre. Luego triste. Mañana. Mañana te diré todo. Te odiaré. Te mentiré. Mañana aprenderé a bailar. A pensar. Recapacitar. Mañana ganará el Fenerbahçe. Mañana iré a visitar a mi abuelo. A su tumba. Trabajaré la tierra. Plantaré patatas. Arreglaré el grifo del baño. Mañana será distinto. Todo se aclarará. Te lo prometo. Mañana Obama pedirá perdón. Devolverá el Nobel. Mañana se aprobará el presupuesto. Volverás a mí. Te querré. Me odiarás. Una y otra vez, me odiarás. Luego te irás. Para siempre. Mañana. Mañana puedes venir a mi casa. Almorzaremos juntos. Te gustará el menú. Sabes que cada día cocino mejor. Eso lo sabes. Es que lo hago para ti. Luego me perderé. Más tarde me perderé. Te perderé. Nunca más te escribiré. Nada sabrás de mí. Por un tiempo. Porque mañana tomaré un bus. Un bus que me dejará en una ciudad cercana. Una ciudad desconocida para ti. Y luego allí. Tomaré un cuarto de hotel. Un viejo cuarto de hotel. Me ahorcaré. Mañana.
Ilustración de Javier Molinero.
6 comentarios:
11:24
otro post bipolar.
12:21
Mañana comento.
14:40
Sr. escritor: sus poemas andan volando.
Visita mi blog y este enlace:
http://unabrilencantado.blogspot.com/
23:42
La enumeración recuerda enumeraciociones. La horca es íntima y sin metáforas.
Santiago decía: "Si es así, ojalá díos me dé fuerzas para llegar a las vías del ferrocarril"
Que se yo, los médicos dicen que los balazos en la jeta son una reacción alérgica.
19:58
Ayer, nuestra charla versó acerca del mañana, me fui pensando en tu bronca, es extraño echarle la culpa al mañana cuando es uno quien posterga las deciciones. Cuando llegó mi mañana me enteré de algo estrepitoso, el canalla se fue a otra ciudad, contrató una mudanza y envió todo aquello en lo que invirtió mi dinero, tomó el avión y se fue, por supuesto sin pagarme. Mañana concha de tu madre!! por qué tenías que llegar!
14:10
Camino sobre una línea imaginaria, una línea que no es línea, una línea que no existe. El abanico de posibilidades se abre a cada instante y se cierra con cada decisión, para abrir paso a otro abanico que desdobla los futuros próximos pero lejanos. Hay un entrecruzamiento de azar y destino. Soy libre, pero condenado a elegir. Mañana es una categoría, una manera de llamar a eso que será hoy, que será ayer. Freno. Dudo. Me pregunto qué hacer. Uso la balanza. Tiro los dados. Apuesto todo. El infinito del universo pone todo su peso sobre mi ser. Tengo el alma abierta. En esta decisión pongo mi vida y mi coraje. Doy el paso. Acaba de pasar un segundo. Ya es mañana.
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