Javier Molinero: Viva la Democracia

Javier Molinero: Viva la Democracia


De un lado la CNT, del otro, la policía. Un poco mas allá, el gobierno, aquí, el Rey, enfrente, la oposición parlamentaria, y agrupados al fondo las ONGS, tres o cuatro religiones minoritarias, delegaciones provinciales de multinacionales desplazadas y privatizadas después de haber sido nacionalizadas por un gobierno anterior, y a punto de llegar: El Papa, la canciller, Ana Botella, el embajador de Italia en Lituania, una de las infantas, ninguno de sus consortes, un presidente de autonomía y otro de la asociación vecinal de un P.A.U. de cuyo nombre no me acuerdo.

No experimento ninguna simpatía por el "obrero idealizado"en la mente del comunista burgués. No me cae bien la patronal. No tengo necesidad de preguntarme de que lado estoy. No estoy. Estoy leyendo otras cosas. No tengo empatía con el presidente, ni con los ministros. Tampoco con la oposición. Pienso que vivo al margen de muchas cosas. Un "Sálvese quien pueda" prolongado. No hice la mili. No Voté jamás. No soy de fiar. Dubi Du Duá. Aquí estoy: Una mente pensante y respetable. Un artista de la clase obrera Un artista de mierda.

Todos los soldados tienen piojos. Todos los anarquistas que conozco son unos payasos. Todas las ministras que me han presentado son unas zorras. A todos los de la oposición les he visto borrachos. He acompañado a muchos comunistas a urgencias con objetos atrapados en el recto. Las campañas electorales de mis amigos socialistas las cerraban de putas y yo, aunque no voto, les acompañaba. La canción del himno de la autonomía, la escribimos a dos manos "El Pedrín" y yo, una mañana en el coche, después de un after. Los ecologistas que cenaron en mi casa, la semana pasada, eran bulímicos. Me han dicho, en privado, que el presidente se droga. También se comenta, que la portavoz de la oposición se masturba en los baños de Las Cortes, para luego ser mucho mas eficiente en su intervenciones. Tengo mucho material fotográfico que compromete a alcaldes, ex ministros, altos cargos y mujeres de éstos, y a sus hijos, y a sus hijas, y a sus familias. Alguna vez he ido a recoger a la hija de alguno de ellos al hospital, tras pasar por un coma etílico, o por drogas. Entiendo que me llamen para no comprometer su situación. Es una posición delicada. Hay que cuidar de nuestro políticos y de nuestra monarquía. Ellos cuidan de nosotros el resto del año. 

Viva E.S.P.A.Ñ.A Viva la Democracia

Blog de Javier Molinero

2 comentarios:

es un honor

Para mí también Molinero. Un abrazo.