Yoel Novoa: Calle

Yoel Novoa: Calle



Confill era la goleta, playmount fue el astillero en donde la construyeron en 1874. Era como un cisne, muy veloz, parecía muy desvencijada, pero no era así, la compraron unos hombres, perteneció a varios habitantes de San Andrés, por turno; la estrellaron unos gringos, no recuerdo los nombres, esa goleta fue muy importante. Yo me crié aquí, en Bogotá, pero también me crié en Cali, en Barranquilla, en Santa Marta, en Maracaibo, en San Andrés, seguro. Mi mujer francesa una vez me hizo un reportaje muy bello, hay un hombre que tiene el reportaje que me hizo mi mujer francesa. Ese hombre está en San Andrés, yo nunca viajé en esa goleta, pero podría ser… Una vez estaba yo con la mujer de un torerito, pero de un torerito muy famoso, yo pasé una tarde con la mujercita, mientras él toreaba. Se separaron no hace mucho, ella no aguantó las corridas que durante diez años que el hombre se pasó toreando, no aguantó más.
Este Jotamario siempre se ha creído que yo soy una especie de verga ambulante. Tiene razón, pero el toma por el lado social y entonces se asusta A mi mujer francesa, la había conocido de antes que hubiera perdido sus joyas; amar y cantar cuesta caro.
Mi padre es mi hermano, mi hijo es mi hermano, la puta que los parió es mi hermano, te lo he dicho todo… necesito plata, cada día tengo que pagar treinta pesos en el hotel, no voy a un lugar más barato, porque me piden 15 días de adelanto, y no tengo. La plata la pido, siempre doy algo a cambio, cuadros, las gracias. Acabé de comer y tengo hambre, ¿sabés que me estoy muriendo? hoy me desmayé a la mañana, parece que los riñones dejaron de funcionar y las enzimas se pusieron a pasar, no tengo plata para vos, ni para mí ni para Magdalena. tengo una prima loca que se llama Gloria. Mirá este punto; los conquistadores llegaron al palacio del rey, el rey les dio asilo, pero no quisieron aceptarlo porque era el rey de la candela, Me hacen falta diez pesos para irme a dormir, no tengo nada en ninguna parte, pero hay cosas que quiero hacer, ¿verdad? Seguimos en lo mismo, hare krisna, hare, hare, hare; eso es una raga, son sílabas que tienen un determinado número de vibraciones, por ejemplo; en los momentos de falta de estabilidad se puede repetir una raga, ayuda a estabilizarse, todo sonido tiene un valor emocional, ¿verdad?, las leyendas acerca de la s palabras mágicas, no son tan inciertas , por eso el latín que se usaba hasta hace poco, cabía reaccionar de cierta forma a la gente. Muchas palabras indígenas, las que nacen en las calles, la música hace mucha falta, las cosas que hace falta oír porque somos mucho más perceptivo de lo que creemos, A mí me gustan los boleros, porque es lo que uno más escucha, además Gloria, mi mujer, los ama. Gloria me mandó pedir disculpas con su padre, me mandó a decir que sigue conmigo. Hay sitios en donde todo el mundo come con la mano derecha y hay sitios en donde todo el mundo come con la mano izquierda. Cuando quieras te diré el poema de la vaca de humauaca. No puedo poner expresión de odio, es que el odio no existe, hay pasión, Eso es todo, el amor es una pasión, hablo de cosas íntimas porque tenemos otro idioma.
Ofrecí dar una conferencia en el nuevo teatro, una mesita, una sola luz, una silla, vamos a cobrar cinco pesos la entrada y grabamos una cinta, una sala toda iluminada, ¿micrófono?, sí, es que cuando yo hablo lo hago muy bajito, con un cable largo en el micrófono no soy yo quien grita; yo soy demasiado demagogo, se hace lo que se pueda; es decir, soy un paisa más. Yo le dije a mi madre un día, mamá ama a tu hombre mientras le crece el pelo. Mi última mujer no sabe decir sí, mi primera mujer solamente sabía decir; sí. Vos sos increíble, me alegro que mi mujer esté entre nosotros, yo creo que mi compañero me comprende, ¿vos tenés algún compañero?, ché. Cualquiera diría que no se puede jugar a las pelotas, y sin embargo somos tan niñas. como recién llegados al planeta, ¿verdad? Digamos, seguir el hilo de una idea por demasiado tiempo, es encarretarse sin adentrar mucho en el meollo de la idea, te voy a recitar un poema de una vaca que había una vez en humahuaca, claro que la vaca comprendió y entonces la historia fue, es todo, ¿te das cuenta? Estoy perdido, ocurre que me enamoré de dos argentinos, una pareja, hombre y mujer, ocurre que no puedo hacer nada a causa de una gonorrea, ocurre que tengo que pedirte algo… Ahora te digo que conozco libros que no han sido publicados, no hace falta publicarlos, ocurre que yo conté una historia para Gloria. Me ha ocurrido una cosa, yo le estuve hablando a Gloria de que yo tenía una amante francesa rubia, ¿verdad?, ocurre que la chica existe, pero no se puede hablar de ella porque yo nunca me acosté con ella, ¿si pudiera ser que la conociéramos verdad?, podría hacerle daño a Gloria, ¿le hablaste hoy a los chicos del teatro, acerca de mi amante francesa?, te menciono esto porque es importante, es que Gloria, guerde el ojo, es tanta su angustia que yo siempre tengo que dar un espectáculo para llenar su vacío. De todas maneras te digo que yo no me acosté con mi amante francesa, no te olvides porque hace quince días que estoy jodido, , no he contagiado a nadie, hace quince días que tengo gonorrea, me la pasó Gloria, ella está en tratamiento, esto necesita una vacuna, yo quiero que gloria se identifique con la amante francesa, es decir, se aproxime a eso, además, Gloria, un día de estos ¡va a tener que aprender francés!, la gente del teatro está muy hostil conmigo y eso es lo que yo buscaba, no quiero a nadie cerca mío, ser aceptado implica muchas cosas, por ejemplo; vos me aceptaste en cualquier plano de la realidad, vos no buscabas eso, pero ocurrió.
Mi padre tiene unos manuscritos míos que yo le dejé hace años, ya, antes de volverme loco, ¿comprendés?, yo estuve loco sin haber tomado drogas, sensaciones de equilibrio, perdida del equilibrio, distorsión de los volúmenes. Después recorrí la historia con ayuda del ácido, claro, ¿no tenés entre tus cosas algo que me pueda servir?, ¿quieres que te muestre la verga?, nosotros… intelectuales. Espero que no me confundas con un hippie, ¿verdad?, recuerdas que estuve llorando esta mañana , solamente los hippies no lloran, estoy llorando, es que los gonococos me afectan el sistema nervioso, voy a tener que perder todos mis dientes, en San Andrés hay dos dentistas muy buenos, el problema que tengo en San Andrés, es que quiero hacer una casa que cuesta cinco millones de pesos, es que quiero hacer una escuela de pintura y arte dramático internacional, los gobiernos pueden dar becas para cuatro o cinco estudiantes por país, ¿qué ocurre cuando alguien tiene hambre? …come.

8 comentarios:

Anónimo dijo...
12:49
 

Este muchacho amigo tuyo siempre me gustó...¿alguna vez te lo dije?mmm

Si recuerdo que me lo dijiste mmm. Hace como 8 años que no sé nada de él, en una de esas aparece por acá.
Un abrazo.

Anónimo dijo...
13:36
 

Vi la nueva cara del milodoncity, está muy buena.mmm

Anónimo dijo...
23:18
 

este texto es del pintor nadaísta enrique calle, quien se firmaba Kat. él muriío hace mas de 10 años. era el pintor de las islas de san andres y providencia, enb el caribe colombiano. segun entiendo, el texto aparece como si fuera de Yoel Novoa, un actor que paso por colombia conformando el grupo Marta y Yoel. el "calle", después de los dos puntos no explica nada. te siguen metiendo los dedos en la boca, hugo. menos mal que uno se da cuenta de todo por el internet. el nadaismo cumple 50 años este año. recibe un abrazo

jotamario arbelaez

Anónimo dijo...
18:08
 

Kat fue el ultimo de los pintores malditos de Colombia,sin embargo los nadadista lo despreciaban,fue el mas autentico de todos ,los demas fueron absorvidos por la sociedad de consumo,si no vean al burocrata de jota mario.
Diogenes.

Gracias a Internet me entero de la muerte del querido Calle. Era presumible pero personalmente quería dejarla congelada en la nada, en la felicidad de aquellos años. Me extruña Jotamario que fue otro personaje querido en mi paso por Colombia, que diga que yo uso las palabras de Calle (¿Para qué las uso?). Calle fue mi amigo y él hablaba para que yo anotara lo que él decía, cuestión que fue un invento existencial con reflejos literarios que sucedió entre Calle y yo. Una obsesión inolvidable.
La palabra de Calle que publica Hugo es la de la isla de San Andrés, en el Caribe. Hay otra primera que es la palabra de Calle en Bogotá y de esa, recuerdo que le dejé una copia a Jotamario en Bogotá antes de irme con Marta a San Andrés (1970).
Con los recuerdos y las experiencias, de una forma ven la realidad Jotamario, y de otra Yoel.
Supongo que la muerte habrá dignificado socialmente al maestro Calle. Eso a él le importaba un carajo. Fue un miserable alucinado rechazado por los que lo rodeaban. Nunca supe que fue de él después que lo reencontré nuevamente en San Andrés volviendo yo al continente. Por ese entonces vendía sus cuadros al por mayor -muy baratos-y tenía un ritmo de vida ya no miserable, sino casi opulento pues me invitó varias veces a comer.
Una vez más volví a verlo en Bogotá (1975), con su mujer y el hijo que les acababa de nacer, el hijo de Calle. Después nunca más, hasta el día de hoy en que a través de Jotamario e internet me entero de su muerte. Chau amor, chau. "Soy tu abogado, tu amigo, te amo"
Yoel

Mis respetos y admiración a Yoel Novoa. Un Maldito Integro.




hugo

Me equivoqué: El texto que reproduce Hugo es el de Bogotá, el primero. Espero que el de San Andrés lo tenga también grabado para ponerlo en "Decepción". Si no se lo mandaré.
Cuando volví a Buenos Aires (1978), un zoólogo esoterista, con el que curtí una amistad de tres o cuatro años, y al cual le dí a leer un impresionante mamotreto que contenía el amontonamiento de mis experiencias del viaje teatral de 10 años que había hecho. El zoólogo me dió duro, me dijo que apenas un 15 o 20 % era salvable, y eso con trabajo. Cuando habló de Calle, me dijo: "Calle merece un retrato de su parte, ¿no le parece?".
Hice caso a las indicaciones del zoólogo y tengo mi retrato de Calle, pero es mínimo. Para mí la palabra de Calle sigue siendo lo que es, palabra de enseñanza, absolutamente descompaginada pues lo anotaba cuando podía y el cabrón cuando me veía escribir hablaba muy bajito de forma que yo podía entender cualquier cosa. Ahora cuando se daba cuenta que yo no había entendido, entonces repetía, y como esto sucedía generalmente en bares y cafeterías, siempre había testigos que se extrañaban ante el fenómeno de la charla reverberada, que podía a las tres liturgias pues la libertad era total.