Todas las chicas me dejaron. Todas las chicas quieren volver. Casi todas están lo suficientemente locas como para hacerlo. Cada día engordo más. Cada día más viejo. Cada día más borracho. El velero encalla en el roquerío. En lo alto aves rapaces prefiguran el botín. Rengueo de mi pierna derecha. Tengo una costilla astillada. Un solo mechón de pelo en la testa. El contraste con el favicon se hace cada vez más evidente. Todas las chicas que me dejaron han sido dejadas. Al final sé que ninguna de ellas volverá. Es mi lúgubre consuelo. No las necesito, ellas tampoco a mí. Solo quiero cerveza y más cerveza. Una fábrica de cerveza. Las chicas, todas ellas, se las dejo a los chavales de Vallecas ¡para que sufran! Ya bastante alegría me dejaron. Todas las chicas del mundo para ellos. Toda la cerveza del mundo para mí. El averno es un maravilloso paisaje de descanso. Qué rápido se va todo. Ya estoy de vuelta.